La estrategia de manejo inicial para pacientes con FA incluye la detección y el manejo de las complicaciones clave y los factores de riesgo cardiovascular, incluidos los accidentes cerebrovasculares y la insuficiencia cardíaca. El tratamiento temprano es importante ya que puede mejorar la esperanza de vida y la calidad de vida del paciente.^1,2 Las opciones de tratamiento para controlar la FA a largo plazo incluyen la terapia de aversión al accidente cerebrovascular, la terapia de control de frecuencia y las estrategias de control del ritmo.